La cagaste René Pérez. Así de simple, así de sencillo, tan concreto como tu patética "párenme la cabrona música" o tu "no estuve en un jacuzzi agarrándome las bolas" o tu sencillamente estúpida "váyanse pa´l carajo". Y si pues, no soy tan hombrecito para subir a la tarima y verme contigo, porque no me quedé a esperarte, porque lo que hiciste el sábado, tirando para domingo, no tiene ni la más mínima cuota de respeto por aquellos a quienes dices "deberte", tu público, tu "pueblo".

No me subí a la tarima para decirte tus verdades a la cara, porque en casa me esperaba un compromiso más importante al día siguiente, que era el de decirle a mi hijo de dos años (que no iba a cambiar su horario de levantarse) que ni por todo el oro del mundo o la diversión más alucinante deberá dejarse nunca jamás pisarse el poncho.

No seré tan "hombrecito" como tú para pedirle a quien no esté de acuerdo contigo que suba al escenario "para vernos", mientras cincuenta gorilas de seguridad rodean tu presentación, haciendo más que imposible ir a decirte un par de palabras en la cara, pero al menos me queda la sensación que eres menos persona que cualquiera de nosotros.

Y si nadie subió para decirte nada, fue porque la mitad de tu público se quedó dormido, ebrio o fumado para reaccionar ante tu furibunda y estúpida performance digna de un patán cualquiera, que se cree superior al resto porque tiene unos dólares más (porque vamos, no me vas a decir que no tienes un poquito más de dinero que cuando empezaste a decirle a la gente "salte del clóset, destápate...)

Un patán que sin el menor reparo,  no tuvo la decencia de decirle a los que se quedaron, siquiera una disculpa, sino que entraste por la puerta grande haciéndote el muy bueno, el bravo del barrio, insultando y mandando "Pa´l carajo" a quien no estuviera de acuerdo contigo.

Dices que no eres como Shakira, pero bien que cantaste junto a ella. Computas que no eres como Luis Miguel, pero eres tan arrogante como él. Fuiste a gritar a Venezuela, "Puerto Rico libre", ¿en un concierto el mismo día que tenías que tocar aquí?, ni el más novato de los rockeros hace eso.

Encima le tuiteaste a alguien que llevabas tres días sin dormir. ¿Y qué hacemos? ¿te agradecemos? ¿te felicitamos?. Es tu problema si asumes más compromisos de los que tu agenda, tu cuerpo y tu cerebro te permiten. Encima como te pusiste bravo, uno que si escuchó tu amenaza, quiso subir, pero tu hombría estaba protegida por los guardaespaldas y la seguridad del concierto que no dudaron en partirle la pierna a quien si quiso ponerte en tu sitio. Así, con cincuenta guardaespaldas también me pongo bravo.

Le cantas al pueblo, a la revolución y al inconformismo, y no eres más que otro conformista más, que se comporta como un divo que ya logró lo que quería, vender, obtener ganancias y ser famoso, además de cantar con quien quieras... si Mercedes Sosa viera lo que hiciste la madrugada del domingo, ella te manda "pa´l carajo" raperito de ventana.

La cagaste, René Pérez y en cantidades industriales... porque nos faltaste el respeto, si el clima fue el problema, hubieras venido más humilde y de seguro ni una llave te arreglaba la cara... pero no, decidiste hacer la del divo, la del ofendido... la del bacancito, y no pues, no porque seas una ¿estrella? se te puede perdonar, ya no había ganas de tonear, no eres una estrella, te estrellaste, eso pasó.

Lo patético del asunto, es que si se te ocurre venir, la gente irá corriendo a comprar su entrada... la cagaste René Pérez, y felizmente me fui esa noche de San Marcos, para no terminar de ver como te ibas cayendo en el pozo de mediocridad y conformismo que tanto criticas... sólo te falta el "bling bling" y el abrigo de piel, porque los guardaespaldas que protegen tu hombría de escenario, ya los tienes...